Arbusto introducido de follaje perenne que llega a medir hasta 3 metros de altura en condiciones propicias. El rododendro es de crecimiento lento y florece durante primavera, idealmente abonar con fertilizante de pH ácido. Necesita riegos frecuentes y protección contra el sol directo para evitar las quemaduras de las hojas. Esta especie no necesita ser podado, a no ser que se requiera corregir su aspecto y en ese caso se poda al final de la floración. Puede mantenerse en tierra o en maceta.